Rondaia es entretenimiento y es humanidad. Rondaia es también símbolo de alegría, de momento de descanso, de reunión entorno a personas queridas, de música. Rondaia es, en esencia, el reflejo del carácter de los mallorquines. La transmisión de valores antiguos, pero que siguen siendo vigentes y de plena actualidad.
Hemos llamado Rondaia a nuestro proyecto, porque queremos que se identifique con todos estos valores, presididos por la hospitalidad mallorquina y el estilo de vida mediterráneo: alegría, descanso, reunión, calidez, personas queridas, que se dejan acoger y que disfrutan de la isla, en un entorno tradicional, perfectamente adaptado a las comodidades de la vida moderna, pero sin perder su esencia y autenticidad.
En esta primera fase, el proyecto Rondaia se concreta en la plantación de un viñedo ecológico y la construcción de un alojamiento de agroturismo.
Los alojamientos se sitúan en diversos edificios existentes en la finca, que conforman un pequeño resort, integrando lujosas suites y villas.
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Un proyecto en el que ha participado toda la familia propietaria de la finca. Cada uno aportando sus conocimientos, gustos, experiencias, y lo que mejor sabe hacer.
¡Esperamos que lo disfrutes!
El proyecto Rondaia se completará, en un futuro próximo, con la instalación de una bodega para elaborar nuestros propios vinos y la implementación de diversas actividades de enoturismo y promoción del mundo del vino, tales como visitas a la viña y la bodega, catas, degustaciones, participación en la vendimia, cursos formativos y la creación de un club para los amantes del vino.
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En Rondaia hemos dedicado especial atención al diseño de interiores, tratando de conseguir estancias amplias, acogedoras, muy luminosas y perfectamente integradas en su entorno.
Para las villas hemos utilizado materiales naturales y una paleta de colores inspirada en la naturaleza circundante. El producto local ha sido el protagonista en el diseño de las habitaciones, baños, carpinterías, muebles, lámparas y demás piezas ornamentales. Siendo todos los materiales autóctonos de la isla.
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Para las suites hemos tratado de mantener el estilo y colores originales del edificio, con un carácter y una decoración más tradicional.
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La decoración de las estancias, incluyendo el diseño exclusivo de las kitchenettes, parte del mobiliario y los cuadros, lleva la firma de Francina Arrom -by Wansina-, hija de la familia propietaria, arquitecta superior que ha tomado el relevo generacional de su abuelo, Gabriel Arrom, afamado decorador, cuyas anteriores intervenciones en la finca, han sido recogidas por las más prestigiosas revistas de decoración.